El primer ministro Pascual Obama Asue, juntamente con el ministro de Sanidad y de Bienestar Social Salomon Nguema Owono deberán ser llevados a los tribunales para responder por las difamaciones y calumnias difundidas contra María Teresa Alene, médica ginecóloga.
Según fuentes fidedignas, la ginecóloga, muy conocida en Bata y en toda Guinea, y su madre de 105 años, NO ESTÁN INFECTADAS DE CORONAVIRUS. De las tres pruebas que las han hecho, la primera dio positiva pero las dos restantes dieron negativo. La primera fue un falso positivo o una manipulación. No solamente eso sino que ella y su madre fueron puestas en cuarentena en un establecimiento en Bata, sin recibir ningún tratamiento ni atención alguna.
El colmo de todo es que la unidad de gestión para el coronavirus de Bata no está equipada. Para atender a pacientes sospechosos de COVID-19 el personal del centro ha tenido que utilizar plásticos en lugar de batas y por supuesto sin mascarillas ni medicamentos. Los médicos que prestan servicios en esta unidad corren un alto riesgo de contagiarse si hubiera un caso real de contagiado y se teme que algunos puedan por miedo abandonar el servicio.
Aparte de las informaciones calumniosas sobre la doctora Alene y su madre, hay sospechas que el llamado primer ministro y el ministro de Sanidad han desviado dinero que debía dedicarse a un equipamiento adecuado, mientras distraen a los guineanos utilizando los medios informativos que monopolizan, sin que nadie más pueda acceder a ellos y presentar otra versión de los hechos. En concreto se sabe que estos dos individuos acusan a Alene de haber violado las reglas establecidas por el gobierno de Guinea Ecuatorial para evitar la propagación del covid-19, y proponen unas medidas sancionadoras contra la supuesta infectada, olvidándose que cuando se hizo público dicho comunicado, la doctora Alene ya se encontraba en Guinea Ecuatorial mucho antes, (el comunicado y el billete de Alene tienen fechas).
Aquí Pascual Obama y Salomón han actuado de mala fe para arruinar profesionalmente a esta mujer que tanto ha trabajado por la salud de muchos guineanos y guineanas.
Estas malas actuaciones de ambos ministros deberían encontrar una respuesta de las autoridades judiciales. Deben explicar el por qué tienen manía a la familia de la ginecóloga Alene.
Recomendamos a la gente que revisen todos los comunicados de Salomón, empezando con el primero, donde informan erróneamente del primer supuesto contagiado, dos en realidad, cuya descripción no coincide con la Dra. Alene.
Fuente: Comité continental de Unión Popular