Esta tarde, en el telediario de Televisión Asonga de las 20 horas de hoy, 22 de abril de 2020, los guineanos han sido informados por el Ministro de Sanidad del primer fallecimiento por coronavirus en Guinea Ecuatorial, ocurrido en el Hospital Regional de Malabo el domingo día 19 de abril, de un varón de 49 años. La TV Asonga ha ofrecido un reportaje particularmente detallado sobre las circunstancias de la muerte y las declaraciones del hermano del fallecido.

Habiendo llegado el enfermo  inicialmente al policlínico Loeri Comba por un malestar que venía presentando desde unos días, su estado no cesó de empeorar a pesar del tratamiento instaurado en este establecimiento. Entonces, la familia decide trasladarlo con sus propios medios al centro La Paz, a priori mejor equipado. Al llegar a este centro y ante los síntomas que presentaba el paciente, los médicos les aconsejan mejor dirigirse al hospital general por ser este el establecimiento en conexión con el Comité Técnico de Vigilancia y Respuesta contra el coronavirus. De nuevo la familia traslada al enfermo a este hospital. El hermano del fallecido llama a la línea verde del Comité Técnico (teléfono 1111), y la respuesta es que los equipos de intervención no estaban disponibles en ese momento y que ¡¡pasarían en uno o dos días!! Ante esta respuesta, estupefacto, es el médico responsable del servicio el que decide repetir la llamada al Comité Técnico, obteniendo la misma respuesta. Entretanto el paciente empeora y fallece de insuficiencia respiratoria aguda severa. Informados del desenlace, es cuando el equipo del Comité Técnico llega a posteriori para tomar las muestras post mortem. Y luego se van, como si nada, como si el fallecido fuera un simple objeto, sin explicación ni disculpas  a la familia.

El relato de la familia, que ha sido de total indignación, ha sido demoledor para el Comité Técnico en su pretensión de llevar una gestión adecuada. Ante los micrófonos de los medios informativos, el hermano del finado, refiriéndose al Comité, resumió su interlocución diciendo: “Cada momento con su historia”. O sea, en ningún momento fue coherente el discurso de los responsables del Comité.

Este primer caso de fallecimiento por COVID-19 nos lleva a las siguientes conclusiones:

  1. Queda claramente en evidencia la poca preparación del Comité Técnico de Vigilancia y Respuesta al confirmar la total falta de coordinación de todas las estructuras involucradas en el previsible manejo de los pacientes de esta enfermedad en nuestro país, como lo vienen denunciando insistentemente varias voces estos últimos días.
  2. La llamada al número verde 1111 no desencadena la inmediata respuesta esperada, como debería ser.
  3. La respuesta dada al llamante por el equipo que se supone que debería acudir sin dilación, es de desánimo total, casi de indiferencia, a pesar de la llamada de un médico.
  4. Se nota una falta total de coordinación entre el Comité Técnico de Vigilancia y los hospitales que se supone deberían estar todos preparados en estos momentos para identificar clínicamente a los pacientes sospechosos y orientarlos correctamente.
  5. Queda claramente visible la falta de preparación de los centros sanitarios públicos para acoger a los enfermos
  6. El transito del paciente por todos los hospitales de la ciudad ha resultado ser un factor aterrador de propagación del virus.
  7. El nuevo hospital de Sampaka no está preparado para recibir a los enfermos del coronavirus.

La cuestión es cuándo se va a distribuir todo el material de protección que nos enseñan cada tarde en la televisión; cuándo se proveerá de equipos de protección y de material a todos los hospitales y centros sanitarios del país para que estén preparados para cuando les lleguen los casos como ocurrió este lunes día 20 en Malabo.

Esta tarde se ha informado también del inicio de la toma de muestras al azar en Malabo y Bata. Parece una excelente iniciativa para conocer el perfil evolutivo del virus en el país, a condición de tener previamente preparadas las estructuras  que vayan a manejar los casos que resultaren positivos.

Todo lo que se ha señalado aquí denota déficits inaceptables en la gestión de la pandemia después de tanto tiempo preparándose. Estas cosas hay que denunciarlas alto y claro, como lo ha hecho la familia del fallecido, porque están en juego las vidas de todos los ecuatoguineanos. En cualquier momento le tocará a cualquiera de nosotros y es cuando nos daremos cuenta de que los responsables no están haciendo lo que deberían estar haciendo.

Y cuando se dirigen observaciones como estas al Gobierno, como gestor de la pandemia, va a saltar con sus insultos y descalificaciones el PDGE, como si fuera el Gobierno, y sin que nadie se haya dirigido a él, para a justificar lo que no tiene justificación, olvidándose de que se trata de la gestión de las vidas de todos los ecuatoguineanos.

Malabo, 22 de abril de 2020

LA SECRETARIA DE COMUNICACIÓN

Radio Macuto Facebook

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *