Tras las fraudulentas elecciones presidenciales, legislativas y municipales del 20 de noviembre de 2022, precedidas de un censo electoral truncado, en las cuales el Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (PDGE) y su presidente se declararon vencedores con el 100 por 100 de los puestos en liza, el Presidente de facto, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, ha formado y publicado, a cuenta gotas, la composición de su nuevo Gobierno.
Para Convergencia para la Democracia Social (CPDS), dicho gobierno, al que CPDS se negó a participar, simboliza la “continuidad” del slogan del partido en poder en las últimas elecciones, y no va a suponer ningún cambio en la vida de los ciudadanos y ciudadanas de Guinea Ecuatorial, puesto que el objetivo del mismo no es resolver los problemas del país, sino contentar a la nutrida y extensa red de colaboradores del presidente Obiang y su PDGE.
En efecto:
- Una Primera Ministra simbólica. Se ha nombrado una primera ministra, cuya presencia es más bien simbólica al ser la primera mujer que ocupa el cargo en el país, pero sin relevancia en el Gobierno ya que, como sus homólogos antecesores, es una mera coordinadora administrativa sin funciones ejecutivas.
- Multiplicación de ministerios y miembros del Gobierno, hasta alcanzar un Ejecutivo de 88 miembros. En unos momentos de aguda crisis económica, en los que hay tanta miseria en el país, con más de la mitad de los 4000 funcionarios recién nombrados sin cobrar sus salarios, en lugar de reducir la abultada nómina de ministros y demás miembros del Gobierno, Obiang ha creado nuevas carteras ministeriales, como las de Juventud y Deportes, Electricidad y Energías Renovables, Tesorería, Ordenación Territorial, etc., subiendo al rango de ministro al traductor de la Presidencia.
- La influencia cada vez más indiscutible de la primera dama y su familia y la Asociación de los Hijos de Obiang (ASHO) en el Ejecutivo. El entorno familiar de la primera esposa del Presidente de la República, incluido el Vicepresidente como sucesor de su padre al frente del la Alta Magistratura del Estado, se ha notado en el nombramiento de personas afines y colaboradores suyos, como son los casos de los ministros de Hacienda y Presupuesto, Justicia y Culto, Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Bosques y Medio Ambiente, Minas e Hidrocarburos, e Información y Prensa, además de las carteras que ya venían siendo ocupadas por familiares y cercanos, como es el caso de la cartera de Defensa. La práctica totalidad de los ministros y viceministros jóvenes, sin experiencia política ni profesional o de gestión, son de la ASHO y familiares del entorno de Obiang.
- Desequilibro territorial. De los 88 miembros del Gobierno, incluidos el Presidente y el Vicepresidente, casi la mitad pertenecen a la provincia de Wele-Nzás, no siendo esta, precisamente, la región más poblada del país.
- Consolidación de una casta gobernante en Guinea Ecuatorial. De los 88 miembros del Gobierno, al menos 4 son hijos del propio Obiang, cerca de quince lo son de otros ministros, senadores, diputados, dirigentes del PDGE o difuntos prohombres del régimen, además de otros numerosos ministros que lo son por afinidad familiar con el dictador o su esposa.
- Desprecio total a la Ley de Presupuestos Generales del Estado. Tantos nombramientos, y los que quedan por producirse, se han hecho sin tener en cuenta los presupuestos aprobados para el ejercicio económico 2023, que contemplaba menos puestos. Ello es una muestra clara de que Obiang no gobierna con base a la Ley.
Todo lo anterior dicho refleja la nula preocupación de Obiang por dar solución a los problemas de los ciudadanos guineanos, ocupándose solo de satisfacer a quienes le mantienen en el poder. ¿Cómo es posible que haya más miembros en el Gobierno (88) que en el Senado (75)? ¿Cómo es posible que la Cámara de los Diputados tenga ahora 101 diputados, y no los 100 que establece la Constitución?
Desde siglos antes de la antigua Roma hasta nuestros días, los pueblos oprimidos siempre han terminado sublevándose. Para evitar que se produzca en Guinea Ecuatorial, Obiang tiene el deber patriótico de entender que Guinea Ecuatorial no es una propiedad privada suya, sino el país de todos, y que la situación sociopolítica es tan crítica, que la mejor solución, en estos momentos, es llegar a la reconciliación nacional, convocando una Mesa de Diálogo con todos los actores políticos y sociales del país para un gran acuerdo nacional, con la observación de representantes de países democráticos y de organizaciones supranacionales, como la Unión Europea, la Unión Africana y las Naciones Unidas.
Malabo, 17 de febrero de 2023.

LA COMISIÓN EJECUTIVA NACIONAL DE CPDS
Fuente: cpdsge.org